Johnny Hansen, presidente de la Sección de Pesca de la ITF, expresó hoy su satisfacción por el acuerdo: "El acuerdo alcanzado con el Gobierno irlandés supone un avance positivo y posee un potencial real para reforzar la protección de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras migrantes en la industria pesquera irlandesa".
El acuerdo pone fin a un largo proceso judicial que comenzó con la demanda interpuesta en los tribunales por la ITF contra al Estado irlandés por los problemas que planteaba el Régimen de Trabajadores Atípicos para pescadores no pertenecientes al EEE, que contribuía a la trata de seres humanos y no eliminaba los abusos contra los derechos humanos a bordo de los pesqueros irlandeses.
Ken Fleming, coordinador de la ITF en el Reino Unido e Irlanda, ha declarado hoy: "Me alegra que el Estado irlandés haya aceptado finalmente que existe un problema. Este acuerdo supone un gran paso adelante para los derechos de los pescadores migrantes en Irlanda.
"No debería haber resultado tan difícil llegar a este punto, ya que los pescadores continúan trabajando hasta 20 horas al día por ocho horas de paga, mientras que las normas diseñadas para protegerlos no se han cumplido. Continuaremos supervisando de cerca la situación", afirma Fleming.
El nuevo acuerdo de inmigración desvincula a los trabajadores no europeos de un único empleador. Los pescadores tendrán ahora la libertad, sin temor a ser deportados, de abandonar un barco si consideran que allí los explotan o les imponen unas condiciones laborales abusivas y encuentran otro empleo.
Gracias al nuevo acuerdo, el Gobierno irlandés introducirá medidas para:
- reforzar la normativa que regula las remuneraciones, las horas de trabajo y de descanso y la dotación mínima de seguridad en los buques pesqueros;
- tratar adecuadamente con los empleadores que incumplan los términos del Régimen de Trabajadores Atípicos;
- mejorar la cooperación entre los departamentos estatales encargados de inspeccionar los pesqueros;
- impedir que los propietarios de embarcaciones deduzcan las tasas de los permisos de trabajo de los salarios de los pescadores; y
- proporcionar información sobre los derechos laborales a los pescadores en su lengua materna.
"La ITF ha negociado este acuerdo de buena fe, pero el Gobierno puede estar seguro de que continuaremos vigilando la implementación de sus medidas, para garantizar que tenga una repercusión real y positiva en las vidas de los pescadores más vulnerables", dijo Hansen.
"También queremos enviar un mensaje claro a otros países: nuestro trabajo se extiende más allá de este caso. Irlanda no es el único país en el que los pescadores y las pescadoras migrantes son terriblemente explotados. Continuaremos luchando por los derechos de los pescadores y las pescadoras de todo el mundo, allá donde se cometan los abusos", concluyó Hansen.
Contacto: Andy Khan-Gordon, responsable de comunicaciones de la ITF, +44 7711 356 964, media@itf.org.uk
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