El sindicato La Fraternidad, que pertenece a la ITF, representa a los trabajadores y trabajadoras del sector ferroviario. Afirma que la compañía estatal Trenes Argentinos, que dirige el ministerio de transporte, llevó a cabo un estudio en la línea Roca, una de las líneas más importantes que cubre la ruta de Buenos Aires a Chascomús. Mediante este estudio se identificaron los problemas que existen en la señalización de la línea férrea y en los sistemas de telecomunicaciones.
Como consecuencia, la compañía suspendió los servicios ferroviarios por razones de seguridad, pero no señaló una fecha específica para reactivarlos. Estableció un plazo de 20 días para elaborar un plan de trabajo con el fin de solucionar la situación y para fijar una fecha aproximada para reanudar los servicios, aunque no ha hecho más declaraciones.
Julio Sosa de La Fraternidad manifestó: "Hemos ido a la huelga porque como trabajadores y trabajadoras del sector ferroviario nos preocupa que Trenes Argentinos no cumpla con su obligación de presentar el plan de trabajo y la fecha de reactivación”.
En una carta remitida el 5 de septiembre al presidente de Argentina, Mauricio Macri, el secretario general de la ITF, Steve Cotton, señalaba: "Nos preocupa la suspensión de un servicio público tan importante para la zona de Buenos Aires y la falta de comunicación tanto con los usuarios del servicio como con los trabajadores/as. Miles de personas se están viendo afectadas diariamente, ya que más de 120 kilómetros de líneas férreas están fuera de servicio”.
“Además esta suspensión se basa en un estudio que indica que solo hay fallos de señalización y telecomunicación en el tramo de la vía férrea que es responsabilidad de la compañía Ferrobaires, situación que debe ser corregida”.
En este enlace podrá leer la carta completa de la ITF en español.
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