Una delegación de la Fédération CGT des Cheminots, afiliada a la ITF, visitó a los ferroviarios de Mali, algunos de los cuales llevan desde diciembre en huelga de hambre.
Su desesperada acción se ha cobrado ya la vida de cuatro trabajadores, dos de sus esposas y dos bebés.
Los trabajadores decidieron movilizarse para reclamar los seis meses de salario que les adeuda la compañía, que los sumió en una pobreza de solemnidad.
El presidente de la Sección Ferroviaria de la ITF, David Gobe, afirma: "Esto demuestra, una vez más, que la gestión privada del sistema ferroviario conduce, tarde o temprano, a desastres económicos y sociales.
"El ferrocarril es demasiado técnico para ser entregado a financieros. Estos trabajadores ferroviarios están luchando por salvar el sistema para toda la población maliense y cuentan con el apoyo de todos los trabajadores y las trabajadoras del transporte de la ITF".
El Secretario General de la ITF, Stephen Cotton, escribió al presidente de Mali, Ibrahim Boubacar Keïta, instando a su Gobierno a que:
- colabore directamente con el sindicato de trabajadores ferroviarios
- pague todos los atrasos salariales
- encuentre una solución urgente para reactivar la línea ferroviaria entre Dakar y Bamako
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