El personal del puerto turco de Borusan, cercano a la ciudad de Bursa, ha sido victimizado por el propietario del puerto, Borusan Logistics, por unirse al sindicato de su elección.
Desde que el pasado mes de marzo el sindicato Liman-İş, miembro de la ITF, empezara a organizar en el puerto de Borusan, más del 70 % de los trabajadores y las trabajadoras decidió afiliarse a él.
La dirección del puerto de Borusan respondió despidiendo a seis de ellos por su afiliación.
Ante esta decisión, Liman-İş realizó una movilización de protesta que paralizó el puerto durante cuatro días.
A pesar de que la empresa solicitó la intervención policial en el recinto portuario para intimidar a los huelguistas, estos no se amilanaron.
Como resultado de las negociaciones que siguieron a la protesta, se llegó a un acuerdo mediante el cual la empresa se comprometía a reincorporar a los seis trabajadores despedidos, así como a dejar de obstaculizar la labor de organización del sindicato.
Si bien estos trabajadores han vuelto ya a sus funciones, la compañía ha incumplido su promesa al seguir poniendo trabas al sindicato.
El puerto de Borusan, que tiene como eslogan publicitario “el puerto que marca la diferencia y crea valor”, es una filial del Grupo Borusan, que se jacta de su contribución a la cultura y las artes de Turquía, especialmente por contar con su propia orquesta filarmónica.
La ITF insta a la gerencia del puerto de Borusan a cumplir su compromiso de no oponerse a Liman-İş, el sindicato que el personal portuario ha elegido por abrumadora mayoría, y a respetar este derecho democrático.
“Esperamos que todos los sindicatos afiliados a la ITF nos apoyen en este conflicto. La ITF es un puzle en el que todos encajamos. Unidos, nuestra causa cobra fuerza”, afirma Fatih Özpinar, secretario general de Liman-İş.
Paddy Crumlin, presidente de la ITF y de su Sección Portuaria, declara: “Aquí tenemos a una empresa más que intenta promocionarse sobre la base de sus valores, entre los que aparentemente no se incluyen los derechos fundamentales a la sindicalización y la negociación colectiva que la OIT garantiza a todos los trabajadores y trabajadoras.
“Nuestro mensaje a la dirección de Borusan es claro: reconozcan al sindicato elegido por el personal o descubran de primera mano qué implica el sindicalismo internacional”.
Muestre su solidaridad con el sindicato firmando nuestra petición dirigida a Erkan Kafadar, director ejecutivo del Grupo Borusan.