Creemos en un mundo basado en la justicia social y económica, donde todos los trabajadores y las trabajadoras sean tratados de forma equitativa, con dignidad y respeto, donde se pueda trabajar en un entorno seguro, exento de miedo y discriminación, y donde cada trabajador y trabajadora reciba un salario que reconozca su papel crucial en la sociedad como motor de nuestra riqueza y prosperidad económicas.
Los trabajadores y las trabajadoras del transporte movemos el mundo y usamos nuestro poder colectivo para lograr un futuro mejor. Trabajamos sin descanso en pro de los derechos, la igualdad y la justicia para que todos —tanto nosotros como el mundo en general— podamos avanzar.
Los Estatutos de la ITF establecen los siguientes objetivos:
En la ITF, nuestros valores son el eje de todo lo que hacemos.
Somos internacionalistas comprometidos con el movimiento sindical mundial. Nuestra fuerza reside en nuestro colectivismo, y nos mantenemos unidos y unidas, más allá de todas las fronteras, para lograr nuestros objetivos.
Celebramos la diversidad y nos aseguramos de que nuestros miembros sientan que los comprendemos, apoyamos y representamos a todos y todas por igual. Nuestros métodos son transparentes, y rendimos cuentas ante los trabajadores y las trabajadoras y nuestras comunidades.
Somos ágiles, y nuestra forma de trabajar está en continuo desarrollo. Nos anticipamos a los cambios para ser quienes tomamos la iniciativa. Aprendemos las lecciones que nos enseña nuestra historia, de la que tan orgullosos nos sentimos, y usamos nuestros conocimientos y experiencia para luchar por nuestros miembros.
Tenemos la firme voluntad de lograr la misión de la ITF. Nos comprometemos y nos dedicamos a cumplirla. Predicamos con el ejemplo y nos mantenemos fieles a nuestros valores frente a todos los retos.